El
momento en que la joven o el joven se encuentra con la realidad laboral, de
contacto, económica y existencial de la vida, puede llegar a comenzar en su
actividad como pasante –remunerado o no-, parte obligatoria de cual sea su
carrera universitaria.
Deben
aprender a compartir, hacer cosas que en sus casas no hacían, muchas otras
cosas que no se aprenden en el aula y sobre todo, llenarse de control, estilo,
disciplina y paciencia para “lidiar” con jefes, empleados, asesores, supervisores
y otros pasantes, sean o no de su misma promoción.
Además,
muchas empresas aceptan pasantes como “una mano más”, saliéndose de los
parámetros que se espera estos aprendan. Y no está mal, aunque debe ser
justificado en el informe a su tutor y conversar sobre qué aprendieron del
exigente mundo laboral y cómo perciben que lo han de enfrentar.
Muchos
pasantes han quedado luego como empleados fijos en ese puesto, dándoles la
oportunidad de desarrollarse, crecer desde lo más fresco que están y formarse a
nivel de instrucción y práctica para seguir ascendiendo.
Todo
queda de parte de la disponibilidad de la empresa y de la propia querencia de
quien realiza la pasantía de seguir trabajando con ellos.
Qué debería de hacer un pasante
Cada
especialidad o carrera o incluso para quienes están haciendo una pasantía para
salir del bachillerato, posee distintos matices, todos dirigidos a que se
aprenda la realidad del mercado laboral.
Una
pasantía es uno de los primeros elementos a colocar como actividad laboral y en
el renglón de habilidades y destrezas de un currículo, por lo que vale la pena
aprender a desenvolverse tanto en los parajes recónditos de su carrera como en
las habilidades sociales y formales que debe tener el trato en una empresa,
comercio o industria.
Actualmente
se ha delimitado que al menos, un pasante debería de aprender con la práctica y
la enseñanza de la experiencia de quienes queden a cargo de enseñarle o al
menos mostrarle, lo siguiente:
Lo que debería enseñársele a un pasante
Los
deberes de un pasante en una empresa pueden variar dependiendo del sector, la
empresa y el departamento en el que se encuentre trabajando el pasante. Sin
embargo, hay algunas responsabilidades comunes que se suelen asignar a los
pasantes en muchas empresas:
Apoyar en tareas administrativas: Suelen
encargarse de tareas administrativas básicas como archivar documentos,
responder correos electrónicos, organizar expedientes, entre otros.
Investigación y análisis: Los
pasantes pueden ser responsables de realizar investigaciones, recopilar datos,
analizar información y preparar informes para apoyar en la toma de decisiones
de la empresa.
Asistir en proyectos específicos: Pueden
participar en proyectos específicos de bajo o mediano impacto, además del apoyo
físico (adornar, ordenar, cargar, vigilar, etc.), brindando apoyo a los equipos
de trabajo en la implementación de actividades y la consecución de objetivos.
Colaborar en actividades de marketing y
comunicación: Los pasantes pueden ayudar en la creación de contenido para
redes sociales, campañas de marketing, elaboración de material promocional,
entre otras tareas relacionadas con la comunicación de la empresa, sin que sea
sólo ello lo que ejecuten, ya que el propósito de una pasantía es activar su
dinamismo y capacidad de involucrarse y resolver o proponer.
Participar en reuniones y eventos: Los
pasantes pueden asistir a reuniones, conferencias y eventos de la empresa para
adquirir experiencia y conocer más sobre el funcionamiento de la misma.
Aprender y adquirir nuevas habilidades: Una
de las responsabilidades más importantes de quienes ejecutan una pasantía es
aprovechar la oportunidad de aprendizaje que le brinda la empresa, adquiriendo
nuevas habilidades y conocimientos que le serán útiles en su desarrollo
profesional.
Es importante recordar que ser pasante es una oportunidad para aprender, crecer
y demostrar tu valía en el entorno laboral, por lo que es fundamental mantener
una actitud proactiva, comprometida y dispuesta a asumir nuevos retos.
Además,
se debe tener en cuenta que las pasantías pueden ser remuneradas o no
remuneradas y que existen regulaciones y leyes laborales que protegen los derechos
de los pasantes, como límites en las horas de trabajo y la provisión de un
entorno seguro.
Los
pasantes también pueden recibir retroalimentación y evaluaciones periódicas
para ayudar en su desarrollo profesional y personal. Y aunque no sea
obligatorio el pago, darles una bonificación que les ayude a pagar pasaje y alimentos,
le permite estabilizar su situación, además de ser una muestra fidedigna de que
el mercado laboral puede ser duro, pero todo trabajo es siempre bien
recompensado.