En la búsqueda de una dirección digital para enviar y recibir información relevante, es común que quienes contratan un alojamiento web se pregunten si los servicios de hosting suelen proporcionar una dirección IP compartida.
La respuesta a esta interrogante es afirmativa, y constituye uno de los servicios más usuales y seguros, comparable a una dirección IP dedicada. Esta opción permite que varios dominios o sitios web compartan la misma IP en un servidor.
La dirección IP compartida son una elección popular, especialmente para
principiantes en la creación de sitios web o proyectos con duración limitada.
Además, son una alternativa rentable que garantiza la seguridad y cumple con
las necesidades de los usuarios.
Características clave de una dirección IP compartida en hosting
Estas direcciones resultan más económicas que las dedicadas, ya que aprovechan los recursos del servidor entre varios clientes, asegurando la independencia y la imposibilidad de vulnerar los recursos de otros usuarios o del proveedor de servicios a través de encriptación y protocolos de seguridad.
Una ventaja significativa es que las direcciones IP compartidas son fáciles de administrar, sin requerir configuraciones adicionales para asignar una IP a cada dominio. Asimismo, se consideran una opción más ecológica al reducir el consumo de energía y la huella de carbono al utilizar menos servidores en un mismo espacio.
Los proveedores que se especializan en este tipo de servicio amplían y adaptan la oferta, incluyendo la segmentación de IPs compartidas por categorías o nichos para una mejor organización.
Además, es responsabilidad de los servicios de hosting brindar a los clientes un certificado SSL/TLS que encripte la conexión entre el sitio web y el visitante, aumentando la seguridad y la confianza en la navegación.
En resumen, las direcciones IP compartidas son una solución óptima para organizaciones y usuarios que buscan un servicio confiable y seguro de alojamiento web, donde la reputación se comparte y se motiva a elegir proveedores que garanticen la integridad de sus clientes.
Por
defecto, todos los correos electrónicos se envían desde las IPs compartidas, lo
que permite empezar a enviarlos una vez validada la cuenta, sin necesidad de
configuraciones adicionales.
Ventajas y desventajas de una dirección IP compartida en hosting
Ventajas de la dirección IP compartida
Los
remitentes con bajo volumen de envío pueden establecer su reputación y
historial con los ISP y servicios de correo electrónico.
La dirección IP compartida permiten a los usuarios enviar mensajes según sus necesidades.
Las
IPs compartidas han sido previamente "calentadas", lo que les otorga
una reputación sin necesidad de un proceso adicional.
Los
hosting de calidad que ofrece cada dirección IP compartida, garantizan fiabilidad y profesionalismo, supervisando el rendimiento de las
campañas de correo electrónico y los correos transaccionales que se envían
desde esas IPs.
Desventajas de una dirección IP compartida
Al
compartir la reputación entre varios usuarios, las campañas erróneas pueden
afectar negativamente a otras organizaciones que utilizan la misma IP.
Problemas
o métricas negativas generados por un remitente pueden repercutir en todos los
demás usuarios, afectando sus tasas de entrega a la bandeja de entrada.
Algunas
empresas no informan si los resultados de una campaña han disminuido o
alcanzado valores mínimos, ya sea para motivar el cambio de una IP compartida a
dedicada o por falta de asesoría técnica de calidad. En estos casos, se
recomienda reconsiderar el servicio.
Cómo adquirir un buen hosting
Comprar
un buen hosting es fundamental para asegurar un buen funcionamiento de tu sitio
web. Aquí tienes algunos pasos que te pueden ayudar a elegir un buen proveedor
de hosting:
1. Determina tus necesidades: Antes
de buscar un hosting, es importante que tengas claro qué tipo de sitio web vas
a tener, cuánto tráfico esperas recibir, si necesitas bases de datos, correos
electrónicos, entre otros aspectos.
2. Investiga proveedores: Investiga
diferentes proveedores de hosting y compara sus planes, precios,
características, soporte técnico, reputación, etc. Busca opiniones de otros
usuarios para tener una idea de la calidad del servicio que ofrecen.
3. Elige el tipo de hosting: Existen
diferentes tipos de hosting como compartido, VPS, dedicado, entre otros. Elige
el que mejor se adapte a tus necesidades y presupuesto.
4. Verifica la velocidad y el
tiempo de actividad: La velocidad de carga de tu sitio web y
el tiempo de actividad son aspectos clave a considerar en un buen hosting.
Asegúrate de que el proveedor ofrezca un buen rendimiento en estos aspectos.
5. Atención al cliente y soporte
técnico: Es importante que el proveedor de hosting ofrezca
un buen servicio de atención al cliente y soporte técnico eficiente, para
resolver cualquier problema que pueda surgir.
6. Seguridad: Asegúrate
de que el proveedor de hosting ofrezca medidas de seguridad robustas para
proteger tu sitio web y los datos de tus usuarios.
7. Realiza una prueba: Antes
de comprometerte con un proveedor de hosting, puedes optar por probar sus
servicios durante un período corto para evaluar si cubre tus necesidades y
expectativas.