Quienes
desean que su día nupcial sea hermoso, bien coordinado, hermoso en todos los
aspectos y que lo inolvidable de la magna fecha en que van a iniciar la vida en pareja, supere
cualquier expectativa, requieren de un especialista en organización de bodas que materialice sus deseos y los lleve al
cenit de la excelencia, solemnidad, coordinación y entretenimiento.
Pero
todo esto va más allá, hay que abrir la mente y poner los pies sobre la tierra.
Iniciar la vida en pareja no se toma a la ligera ni se ve sólo en los aspectos
más bonitos. Es toda una construcción que permite minimizar los embates
físicos, psicológicos, económicos y sociales que el día a día nos trae,
consolidando al amor que ante el registro civil y ante el altar se ha declarado
“hasta que la muerte nos separe”.
Antes
de iniciar la vida en pareja, les sugerimos que toquen, analicen y se preparen
física, mental y responsivamente estos varios temas más comunes de estar unidos
en matrimonio, concubinato o noviazgo bajo el mismo techo.
Verán
que así, como organizan el día de su boda para que sea excelente, organizarán
su vida juntos para que la excelencia, el amor y la estabilidad sean algo
natural.
Deben considerar al iniciar la vida en pareja…
Mantener
una comunicación abierta y honesta entre la pareja. Temer o evitar hablar temas
de su pasado o asuntos que bien pueden resolver juntos, no es tan bueno ni
noble como creen.
Establezcan
metas y sueños juntos para el futuro. Vayan paso a paso, grano a grano, sin
apuros. El disfrute del logro en conjunto será mayor.
Respeto
mutuo en todas las circunstancias. Nunca levantar un puño con ira ni dominar a
nadie por el dinero, el sexo o la comida; mucho menos sacar a flote su pasado
ya pisado.
Apoyo
emocional y estar presentes el uno para el otro. Hasta la persona más seca de
sentimentalismos, puede manifestar empatía y solidaridad, más con quien le
profesa amor.
Considerar
las opiniones y sentimientos de la familia. Recopilar opiniones y equilibrar
concusiones para mejores decisiones.
Gestionar
adecuadamente el estrés y la presión. Escaparse a meditar es necesario y debe
ser respetado por la contraparte, aunque siempre atentos para “estar allí”.
Asegurarse
de cumplir con todos los requisitos legales. Iniciar la vida en pareja implica
tener sus documentos de todo tipo al día. No le den larga, no es un asunto
menor.
Establezcan
un presupuesto claro y realista para cada caso. Sabiendo equilibrar y priorizar
necesidades reales a necesidades impuestas y gustos. Todo ello es clave al iniciar
la vida en pareja y hasta el fin de sus días.
Tomar
decisiones significativas juntos, considerando las preferencias de ambos. Siempre
hay puntos de encuentro, incluso con el “mitad y mitad”.
Invitar
a sus actividades a quienes reflejan lazos familiares y de amistad importantes
a casuales, es equilibrio social.
Planificar
momentos especiales que representen la historia y personalidad de la pareja,
mantiene la llama viva en cada instante, como al iniciar la vida en pareja. No dejen
que la pasión, sorpresa y variedad se extingan.
Preserven
equilibradamente sus tradiciones y gustos, para saber compartirlas.
Preparen
planes de contingencia para saber actuar en los momentos álgidos. Prevenir no
es llamar desgracias, sino aminorarlas.
Establecer
roles y responsabilidades claras en cada aspecto del cuidado del hogar y del
cuidado personal y apoyo en conjunto.
Reserven
tiempo para conectar emocionalmente y así escapar del día a día.
Acepten
que habrá desafíos y que su deber es enfrentarlos como equipo. Pareja significa “estar a la par”,
Reflexionen
siempre sobre el compromiso y la responsabilidad que implica el matrimonio. Eso
no sólo se hace al iniciar la vida en pareja, sino en cada semestre o año. Y no
se dejen llevar por los fracasos, sinsabores o rutinas aburridas de otros. Ustedes
dos son ustedes dos.
Reflexionando…
Iniciar
la vida en pareja implica el prepararse emocionalmente y mentalmente para la
vida en pareja antes, durante y después de la boda. Es ver lo que no conocían,
vivir lo que no imaginan y engranar lo que no sabían que necesitaban calzar.
Sólo
procuren mantener viva la chispa y la complicidad en la relación a lo largo del
tiempo. Y ante cualquier brisa, ocúpense sin temor de expresarlo y buscar
soluciones para bien, no para decaer. El fuego de sus almas es lo que les llevó
al amor y les toca utilizar esa fragua para hacer más sólida esa unión, no para
hacerla añicos.
Celebren y disfruten cada momento juntos, no solo en la boda, sino en la vida en común que comienza. Iniciar la vida en pareja es mera acción y reacción, donde la acción es esforzarse por ser mejores en conjunto, cuidándose individualmente y la reacción será una vida más cómoda en la prosperidad y la adversidad.